lunes, 30 de enero de 2017

Calígula en Twitter

Los dictadores (en particular los que llegan al poder con el veneno de la demagogia) tienen esa característica: son adictivos. Es difícil dejar de verlos, escucharlos, seguirlos. ¿Qué nueva locura se le habrá ocurrido?


Desde que apareció en escena, Trump ha estado hasta en la sopa de los ciudadanos de Estados Unidos. Conforme su inverosímil candidatura fue tomando vuelo, comenzó a estar presente en las sopas de todo el mundo. Los medios y la prensa (que, con excepciones despreciables como Fox News, se le oponen radicalmente) no podían dejar de seguirlo. El deber de informar se convirtió en una cacería por el rating, que encabezaba Trump. Y en un momento el fenómeno se les fue de las manos. Cuando ya era tarde, se dieron cuenta de que Trump dictaba los tiempos, las agendas, los temas. En la naturaleza de los demagogos está olfatear esa sed pública y saciarla poco a poco, hasta crear adicción a su palabra, a su política, a su persona.

Desde hace tiempo el fenómeno Trump me ha recordado mi experiencia venezolana. Un domingo de 2008, una pareja de amigos me invitó a almorzar en su casa. Vendrían periodistas, intelectuales, escritores, empresarios y algún líder de la oposición. A medio día, todos se congregaron en la sala con gran expectación. El anfitrión encendió el televisor. Tomamos nuestros lugares. ¿La Serie Mundial? ¿Una película en DVD? No. La ceremonia era otra: contemplar, como cada domingo desde hacía meses, como cada domingo en los años siguientes, al comandante Chávez gobernar "en vivo y en directo" en su programa "¡Aló, Presidente!". ¿Qué los llevaba como imán a ese ritual? Fascinación, incredulidad, pasmo, miedo, morbo, horror impotente ante una ofensa repetida e incurable. Todo junto. Chávez los había hechizado.

Era una enfermedad universal, una epidemia. Escuché a jóvenes venezolanos lamentar esa adicción nacional en estos términos: tengo una década de desayunar, comer y cenar con Chávez. Chávez es el tema de todas las conversaciones. Chávez en el sueño y la vigilia. Chávez entre semana y el fin de semana. Chávez se robó parte de mi infancia y toda mi adolescencia. Chávez ha dicho que permanecerá en el poder hasta 2030. Temo que Chávez se robe mi vida adulta. Temo envejecer y que Chávez siga ahí. Temo morir antes que Chávez. Temo que Chávez sea eterno.

Los dictadores (en particular los que llegan al poder con el veneno de la demagogia) tienen esa característica: son adictivos. Es difícil dejar de verlos, escucharlos, seguirlos. ¿Qué nueva locura se le habrá ocurrido? En el caso de Chávez, solía imponer sus famosas cadenas de trasmisión nacional a propósito de cualquier capricho. El suplicio era imprevisto e interminable. Había copiado esa práctica a Fidel Castro (su mentor y padre espiritual) cuyos discursos se prolongaban años luz. Pero ni Castro ni su caricatura Chávez sospecharon (aun en sus sueños guajiros) que a la presidencia del imperio llegaría un fascista obsesionado (como ellos) con la omnipresencia mediática.

Trump amenaza con rebasarlos debido a su uso de un arma letal: Twi-tter. Ya no es la noticia de la semana ni la del día la que atrae la atención. Es la noticia del minuto. ¿Qué nueva ocurrencia habrá tenido el magnate esta madrugada? ¿Contra quién "tuiteará" de manera compulsiva? Su adicción (que sin duda existe) desvelará sus noches en la Casa Blanca. A menos de que se someta a un tratamiento, su adicción será progresiva, incurable y (de alguna forma) mortal. Lo malo es que se trata del presidente de Estados Unidos. Por el poder que encarna (y el peligro real e inminente que, a cada instante, representa) es difícil desengancharse de él. Nos ha convertido en adictos a su adicción. Es Calígula en Twitter.

En el mundo de Trump no hay poesía, prosa, música, artes, cultura, ciencias, humanidades. Ni siquiera deportes (salvo las luchas y el golf). En el mundo de Trump solo está Trump y su clan. Su nombre en letras doradas ya aparecía en numerosos inmuebles y desarrollos de Estados Unidos. Su sueño es verlo repetido en todos los espacios del escenario americano (incluido su deplorable muro). Si fuera por él, le impondría su nombre a la Casa Blanca. O cambiaría por él las barras y las estrellas.

No está en nuestras manos detener el tsunami narcisista. Y no podemos tapar el sol con un dedo. Pero sí podemos evitar que la luz negra de ese sol nos devore. Debemos enfrentarlo cada quien en su esfera de acción. Pero al mismo tiempo debemos preservar el tejido de nuestras vidas: los afectos, la razón, la solidaridad, la compasión, la esperanza, la conversación. Y todas las variantes de la creatividad. Preservar la risa y el humor. Mientras Calígula tuitea, cuidemos lo que nos hace personas.
(Publicado previamente en el periódico Reforma)

viernes, 27 de enero de 2017

Ley del más fuerte

Ley del más fuerte

JAQUE MATE / Sergio Sarmiento
27 Ene. 2017

"El primer fundamento inherente a la noción de autoridad es siempre la popularidad".

Adolf Hitler


Cobrar un arancel a las exportaciones de un solo país, para castigarlo o para financiar una obra de infraestructura indeseada, es ilegal. Lo prohíben las reglas del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y de la Organización Mundial de Comercio. Pero Donald Trump no se ha preocupado nunca por obedecer las reglas o las leyes. Impone su voluntad porque siente que es el más fuerte. Hoy, que es el Presidente de la nación más poderosa del mundo, se ha convertido en un peligro no sólo para su vecino sino para el planeta entero.

Preocupa la velocidad con la que se están desarrollando los acontecimientos. Hemos pasado de la inauguración, con un discurso populista para poner a "Estados Unidos primero", al vértigo de un Presidente enloquecido que busca cambiar el país y el modelo económico con una serie diaria de decretos presidenciales -para no pasar por el Congreso- y de anuncios y amenazas por Twitter. Es difícil pensar que sólo han transcurrido siete días desde la inauguración. Si hubo un momento en que una Presidencia de Trump parecía un chiste, hoy se está convirtiendo en una película de terror. Es difícil imaginar lo que puede ocurrir en cuatro años de este gobierno.

El trato a México es una señal a otros países del mundo. Hasta ayer por la mañana yo mantenía la posición de que el presidente Enrique Peña Nieto debía hacer el intento de negociar y viajar a Washington el martes 31 de enero para la prevista reunión en la Casa Blanca. Trump lo hizo imposible, sin embargo, con su tweet de ayer por la mañana en que decía: "Si México no está dispuesto a pagar por el muro que tanto se necesita, entonces sería mejor cancelar la próxima reunión". Ante esta nueva provocación, el presidente Peña Nieto no tenía más opción que cancelar el viaje.

La cancelación, sin embargo, dio pie a una nueva provocación. La gran inquietud de Trump hasta este momento no es cómo construir el muro, sino cómo obligar a México a pagar por él. Una posible fórmula la reveló ayer el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer: "El plan que está tomando forma en este momento es usar una reforma fiscal integral como medio para gravar las importaciones de los países con los que tenemos un déficit comercial, como México". Según Spicer, un "impuesto de ajuste fronterizo", o BAT, se usa en 160 países del mundo, incluido México.

Esta última afirmación, sin embargo, es uno más de esos "hechos alternos" a los que recurre el gobierno de Trump para construir su propia realidad. No existen esos impuestos de ajuste fronterizo. De hecho, los países miembros de la OMC no pueden aplicar aranceles para castigar a un país sólo porque tiene un superávit comercial.

Ajustarse a las reglas internacionales, sin embargo, no ha sido una gran preocupación de un Presidente que tampoco cree en las pruebas de la ciencia en temas como el calentamiento global. Seguramente tomará cualquier decisión para crear un nuevo impuesto sobre las importaciones, las visas o las remesas para pagar por el muro sin importar que sea ilegal. Trump parece decidido a llevar hasta sus últimas consecuencias el inaceptable concepto de la excepcionalidad de Estados Unidos y los estadounidenses en el derecho internacional.

En realidad, lo que quiere Trump es regresar a la ley del más fuerte; y como Estados Unidos es el país más fuerte del mundo en lo económico y en lo militar, tiene derecho a hacer lo que quiera, sin importar los deseos o derechos de los demás países.



· QUE SE CALLEN

Los "medios" de comunicación son "el partido de oposición", "deben estar avergonzados y humillados y mantener la boca cerrada y simplemente escuchar por un rato". No, la declaración no es de un dictador latinoamericano, sino de Stephen Bannon, estratega de la Casa Blanca.



@SergioSarmiento

martes, 24 de enero de 2017

Federico tiene un arma

CD. DE MÉXICO

IMPRIMIR

Federico tiene un arma

El chico se acababa de cambiar de colegio unos meses atrás y no era aplicado, pero tampoco agresivo ni problemático. Era la primera clase de la mañana y la maestra acababa de repartir un examen de química. Desde su escritorio sacó de su mochila una pistola calibre .22 y disparó de lleno contra un compañero y, después, contra la tutora. Siguió regando balas a diestra y siniestra. Se intentó suicidar pero se le acabaron las municiones: recargó parsimoniosamente, ordenó salir del salón y, antes de que nadie pudiera obedecerle, se disparó a la cabeza. Murió dejando a la maestra y a dos compañeros muy graves.
En Monterrey se inauguraron los narcobloqueos. Fue allí donde un par de muertos frescos fueron colgados sobre avenidas de alta circulación y quemados como teas, donde un casino fue incendiado con más de medio centenar de almas dentro y donde se acaba de revelar la existencia de una narcofosa con cerca de 70 cadáveres a media hora de Monterrey. Pero todos esos horrores podían atribuírsele al narco o a la corrupción e incompetencia de la clase política: al enemigo que llegó de fuera a arruinar ese paraíso al pie del Cerro de la Silla.
Bastó un estudiante de secundaria de clase media alta, inscrito en una escuela privada, para derrumbar a balazos el mito del sueño regio: ese que tiene a los líderes regiomontanos viviendo de glorias pasadas, encerrados en un provincialismo xenófobo tan arrogante como arcaico y anestesiados ante un mundo que los rebasa y que no entienden que no entienden.
Más pronto que tarde se irguieron dedos culpando a los sospechosos comunes: los medios y el internet, la pérdida de valores y, según el gobernador de Nuevo León, las madres débiles o desobligadas. ¿La solución de El Bronco? Destinar 40 millones de pesos a construir cuatro preparatorias militarizadas, “Para que, si ustedes tienen un hijo que no les hace caso, nos lo manden ahí, y ahí lo arreglamos”. Nomás le faltó decir que en 15 minutos. Habrá muchos que le aplaudan, pero poco va a cambiar si, tras un par de días de cadenitas de oración, Monterrey sigue pensando que lo que hace falta para enmendar su futuro son los modelos del pasado que lo llevaron derechito a su presente.
Twitter: @robertayque

lunes, 23 de enero de 2017

No estamos solos, Donald

No estamos solos, Donald

  
     
    
Trump y Obama
Hasta el viernes pasado, el récord de protestas en una toma de posesión había sido la de Richard Nixon al arrancar su segundo periodo al frente de la Casa Blanca, en 1973, por la Guerra de Vietnam. El sábado, ocho veces más que hace 44 años, más de medio millón de personas en Washington, y un número similar en las ciudades más grandes de Estados Unidos protestaron contra la visión y las posiciones de Donald Trump. Las expresiones se extendieron en más de 70 ciudades del mundo con una advertencia: esto es sólo el principio. La unión global contra Trumpilandia fue bálsamo para las angustias mexicanas por la agresividad y beligerancia del presidente contra México, su gente, y su economía. No estamos solos en nuestra indignación e inconformidad, Donald, ni será una batalla aislada; sólo falta que entendamos y encontremos cómo responderte.

El mundo de Trump es lunático, a menos que tenga en su chistera la fórmula para revolucionar al mundo hacia delante y evitar su involución. Los síntomas no son buenos. El viernes usó su discurso de toma de posesión para repudiar a la clase política, a la que acusó de rapacidad y apropiarse de todos los beneficios para crear una sociedad de lujo en Washington, mientras el pueblo estadounidense caía en la pobreza. Su primera acción fue desmantelar el programa de salud de Barack Obama, que afectó a la clase media, pero salvó de la marginación a 23 millones de personas que están entre las más pobres, y frenar los procesos de regulación, que le motivó su primera fricción con el Capitolio. Se asumió como el presidente de todos los estadounidenses, aunque cuatro de cada diez amanecieron ese día detestándolo, y reiteró sus promesas económicas, con lo que quiere convertir una economía de servicios, como es Estados Unidos, a una de manufactura, en un imposible corto plazo.

En política exterior, es China su principal enemigo y quiere lanzarse a una guerra comercial con Beijing, el mayor tenedor de deuda estadounidense. Cree que hay que dejar de apoyar militarmente a sus aliados en el Medio Oriente, con lo que el equilibrio de poder se perdería y esa nación dejaría de ser lo que ha sido durante 60 años, el factor que frena una Tercera Guerra Mundial. Lo mismo piensa de la alianza militar con Europa, y está harto de los mexicanos y sus gobiernos, que han sido sus principales chivos expiatorios en los últimos 18 meses. Las marchas en el mundo fueron contra Trumpilandia; en Estados Unidos se concentraron en las demandas de los derechos de reproducción –por su intención de volver a penalizar el aborto, que sería una regresión de 34 años–, los derechos civiles y la inmigración.

Estados Unidos está dividido como quizá no lo estaba desde 1861, cuando en la primera toma de posesión de Abraham Lincoln, “el aire estaba lleno con rumores de conspiraciones para asesinarlo o capturarlo y llevárselo antes de que pudiera tomar las riendas del gobierno”, según las crónicas de la época. Lincoln recibió la presidencia de James Buchanan, el único que supera a Trump con el más bajo nivel de popularidad al asumir la Casa Blanca (37 por ciento contra 40 por ciento), ante el fracaso para evitar la división que finalmente llevó a Estados Unidos a la Guerra Civil.

Las protestas subrayan la división en esa nación, una polarización a la que Trump, como es, respondió con beligerancia y mentiras. Es la prensa la que provocó las protestas, y también exageró a la baja la asistencia popular a su toma de posesión. Fue la prensa, dijo el sábado durante una visita a la CIA, la que manipuló sus palabras públicas que dice que nunca dijo en contra de la CIA. Lo mismo le dijo al presidente Enrique Peña Nieto cuando hablaron en Los Pinos, el 31 de agosto pasado: fue la prensa la que tergiversó sus declaraciones sobre México y los mexicanos. Trump es un mentiroso compulsivo y una persona violenta que en los momentos difíciles se echa para adelante. No hay que olvidarlo el próximo 31 de enero, cuando Peña Nieto se reúna con él en Washington.

La visita de trabajo es importante, y se dará una semana después de que comiencen las primeras negociaciones sobre el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica entre los dos países. En esas reuniones el gobierno mexicano podrá plantear lo que quiere de Estados Unidos, lo que puede en la relación bilateral, y rechazar o dar paso a una negociación en donde confronten sus visiones. Tendrá que ser muy inteligente el planteamiento y el propio fraseo en sus conversaciones, en parte porque el entorno cambió rápidamente del jueves a hoy ante la fuerza de las protestas contra Trump, que probablemente continuarán enardeciéndose por la creciente oposición al nuevo presidente.

Un hombre de mecha corta es lo que encontrará Peña Nieto en la Oficina Oval, que quizá vea en él una coyuntura para ganar legitimidad a través de sus bravuconadas, hostigamiento y amenazas. El momento no es el mejor para Peña Nieto, pero es el adecuado. Al mismo tiempo, si sus asesores son inteligentes y creativos, y él deja de comportarse pusilánimamente, lo que hoy es un enorme problema puede volverse una oportunidad. No hay mucha expectativa sobre lo que pueda hacer el presidente de México, pero este lunes, en su posicionamiento sobre política exterior, podrá mostrar a todos si algo aprendió de sus errores, o definitivamente no tiene remedio.

viernes, 20 de enero de 2017

Donald Trump- el inició de una era muy oscura...

Donald Trump

México
El día ha llegado.
Donald Trump será hoy presidente de Estados Unidos.
Soy de los que cree que se vienen tiempos oscuros, peligrosos. Para México y para el mundo. En este año he leído y he escrito aquí más textos sobre Trump de lo que hubiera deseado.
Hoy, el día que empieza la nueva época, reproduzco dos párrafos de Andrew Sullivan, desde hace muchos años uno de los más lúcidos observadores de la política estadunidense y que me parecen de lo mejor que he leído este año. Fueron escritos, con clarividencia, antes de las elecciones.
"Sí, es un incompetente, un diletante, un hombre que no sabe lo que no sabe. Muchas de sus acciones probablemente darán lugar a pérdidas en su popularidad. Pero Trump no puede admitir errores y tendrá que negarlo o encontrar un chivo expiatorio para desviar la atención pública. Esas distracciones bien podrían ser profundamente desestabilizadoras y tal vez agravadas por acontecimientos. "Indudablemente habrá otro incidente entre la policía y un hombre negro desarmado bajo la presidencia de Trump. En lugar de calmar a la nación, Trump la incendiará. Habrá un ataque terrorista de algún tipo —y posiblemente una ola de tales ataques en respuesta a su misma elección. Trump lo explotará con la sutileza de un Giuliani y la brutalidad de un Putin.
"Hace tiempo que tengo fe en que alguna versión del fascismo no puede llegar al poder en Estados Unidos. Los acontecimientos del año pasado sugieren una profunda reflexión sobre esa convicción. Un huracán político ha llegado, en la medida que la globalización ha erosionado el poder económico de las clases trabajadoras blancas, y que la izquierda cultural ha exagerado su mano en cuestiones sociales y raciales, y una guerra catastrófica y una crisis financiera han robado a las élites de su credibilidad. Como siempre en la historia, todavía se necesitaba la chispa, el actor único que podía desplegar gran talento demagógico para arrastrar a un país avanzado a la violencia y la barbarie. En Trump, Estados Unidos encontró uno.
"Parafraseando a Benjamin Franklin, vivimos en una república, siempre y cuando podamos mantenerla. Más de dos siglos después, estamos abiertamente contemplando lanzarla en el aire y ver dónde podría aterrizar. Cada uno haga lo que pueda".
Twitter: @puigcarlos

jueves, 19 de enero de 2017

Armas, escuelas, Internet y familias

Monterrey
1. Pudo haber sido un cuchillo o un mazo, es cierto, pero la agresión no hubiera alcanzado ese nivel de gravedad. La presencia de una pistola calibre 22 en las manos de un adolescente del Colegio Americano del Noreste no lo explica todo, pero es una parte clave de cualquier intento por entender esta tragedia.
La facilidad para conseguir armas y el descuido con el que llegan a caer en manos inexpertas, inconscientes, enfermas o criminales son sin duda disparadores de las estadísticas de violencia. También del drama que acompaña a cada punto de la estadística.
Desarmar al país es una tarea urgente: se sabe de la facilidad para comprar un arma en el mercado negro. Pero, al mismo tiempo, es muy importante poner énfasis en la responsabilidad que tienen sobre el destino del arma quienes la poseen incluso legalmente. Cualquiera sabe que el principal cuidado es alejarla de los menores.
2. Creo que las escuelas son otra parte de la explicación y de la solución de problemas como el de ayer. Pero solo una parte, igual que las armas. La ayuda psicológica a tiempo que pueda recibir un alumno es invaluable. Sobre todo, el diagnóstico oportuno de los niños y adolescentes con potenciales problemas serios de comportamiento. Tal cosa prácticamente no existe en México. En general, los jóvenes egresados de secundaria simplemente pasaron sus exámenes... y es mucho decir.
3. Para bien o para mal, el entorno extraescolar también educa (o su contrario). La inseguridad y la violencia que se han vivido en años recientes dejaron huella. Si algo se ha devaluado, es la vida misma. Otro factor del entorno son las redes sociales. Un adolescente con problemas de personalidad encuentra ahí refugio, apoyo para forjar y cumplir sus amenazas.
4. Pero en realidad es en el afecto de la familia o en su ausencia donde se forma de manera determinante la personalidad. Por eso es tan duro lo que se vivió ayer. Nos atañe a todos. Y la vida en estos tiempos no se presta para los cuidados y los afectos.
Día duro. Durísimo.
luis.petersen@milenio.co

miércoles, 18 de enero de 2017

Un adolescente dispara a varios compañeros y a una profesora en un colegio de Monterrey





Un adolescente dispara a varios compañeros y a una profesora en un colegio de Monterrey

El agresor, de 15 años, falleció en el hospital, otras tres personas están gravemente heridas



El agresor, tras disparar a sus compañeros y a una profesora. EPV


Un alumno de secundaria ha entrado armado en el Colegio Americano del Noreste, una escuela privada al sur deMonterrey, la capital de Nuevo León (norte de México). El menor, de 15 años de edad, disparó contra varios de sus compañeros y su maestra. Después de amenazar al resto, se disparó a sí mismo en la barbilla. El secretario de Gobierno del Estado, Manuel González, confirmó este mediodía que el agresor, F. G., falleció en el hospital donde estaba siendo atendido. Sus familiares iniciaron los trámites para donar sus órganos, según el diario El Norte.  
Los hechos ocurrieron minutos después de las ocho de la mañana. Fasci dijo que el episodio duró pocos segundos. El agresor, F. G., hizo el primer disparo sentado desde su pupitre. La primera bala impactó en la cabeza de uno de sus compañeros que se encontraba a poco más de un metro de distancia. El atacante se puso de pie y disparó a Cecilia Solís, que se hallaba de espaldas repartiendo hojas a los estudiantes. Tras el segundo disparo, el resto de la clase se metió debajo de los escritorios. El muchacho abrió nuevamente fuego contra un compañero que estaba arrinconado. Después del cuarto disparo hizo una pausa y se llevó la pistola calibre 22 a la cabeza para quitarse la vida, pero el disparo falló y la bala impactó el techo. Después de recargar el arma se disparó en la barbilla y cayó al suelo entre borbotones de sangre, según muestra un vídeo filtrado por las autoridades encargadas de la investigación.  
Las autoridades han dicho a los medios de comunicación que tres heridos en elcolegio están en el quirófano, donde los médicos tratan de salvarles la vida. Entre los heridos de gravedad se encuentran dos estudiantes: A. C. R., mujer de 14 años y L. R., hombre de 15 años. La maestra Solís, que tiene lesiones en el cráneo, también está debatiéndose entre la vida y la muerte. Otro estudiante más, M. C., de 14 años, está fuera de peligro porque solo tuvo heridas de bala en un brazo.
El agresor también fue trasladado a un hospital privado, donde médicos los trataron por las heridas de bala en la cabeza y en la boca. Los doctores, sin embargo, lo declararon con muerte cerebral este mediodía. El gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, dijo que el estudiante dejó de recibir atención médica y murió minutos después. 
Los padres del menor agresor han sido entrevistados por la Fiscalía de Nuevo León. Fasci ha dicho que el estudiante tenía "problemas sicológicos" y que estaba siendo tratado por "depresión". El funcionario no quiso dar más detalles sobre el arma que fue introducida al Colegio Americano del Noreste en la mochila del responsable. Rodríguez Calderón, conocido como El Bronco, dijo que hasta el momento no existen mensajes o antecedentes que pudieron haber anunciado el ataque en el salón de clases.
El presidente Enrique Peña Nieto ha lamentado en Twitter lo ocurrido al norte del país. “Como padre de familia me duele mucho lo que pasó esta mañana en uncolegio de Monterrey. Me uno al dolor y consternación de las familias”, escribió en la red social.
"Nunca había pasado esto. Es producto de lo que está pasando en otros países, los menores tienen acceso a esa información a través de Internet (...) Nosotros no revisamos las mochilas en un colegio", señaló Fasci. El funcionario habló de la posibilidad de que el Gobierno del Estado regrese al Operativo Mochilazo tras el incidente. Este programa hacía obligatorio revisar los bolsos y mochilas de los estudiantes en las escuelas de la entidad, pero fue cancelado después de que algunos padres de familia protestaran contra la medida. "Vamos a tener que volver a hacerlo y concientizar a los padres y a los estudiantes", dijo Fasci.
Las imágenes de este vídeo han sido editadas para evitar que se pueda reconocer a ninguno de los alumnos. También se han eliminado las escenas en que el agresor dispara a las víctimas. La decisión de publicarlo se ha adoptado tras considerar que el vídeo, borrados los rostros y sin las imágenes más violentas, ofrece una información que pone de manifiesto la inseguridad en las escuelas mexicanas, donde se han llegado a registrar incidentes graves que afectan a la población más indefensa.